El acoso escolar alimenta la cultura de odio | Molino Informativo

El acoso escolar alimenta la cultura de odio

by | Nov 2, 2023 | Comunidades

El acoso escolar parece ser parte, casi inevitable, del proceso de crecimiento. Muchos jóvenes son víctimas o acosadores, en muchas ocasiones dudan de compartir sus experiencias y buscar ayuda para superarlo. Es importante tener en cuenta que el impacto del acoso puede perdurar durante años e incluso décadas. En un momento en el que las relaciones raciales y étnicas están tensas, polarizadas y las redes sociales fomentan el ciberacoso anónimo, es fundamental examinar qué está ocurriendo. Se hace necesario identificar quiénes son los principales objetivos y los perpetradores, así como entender hasta qué punto este tema contribuye a cultivar una cultura de odio en la sociedad. Ethnic Media Services convocó a expertos en derechos civiles, justicia juvenil comunitaria, trabajadores y a una escritora/periodista, a una rueda de prensa el pasado 27 de octubre. 

Becky Monroe, Directora adjunta de Iniciativas Estratégicas y Asuntos Externos, del Departamento Civil de Derechos de California, destacó la importancia de escuchar todas las voces y experiencias en la lucha contra el odio. Su oficina se  enfoca en la protección de los niños y en las leyes estatales o federales que le exigen a las escuelas proporcionar un entorno seguro y libre de discriminación. Monroe mencionó la importancia de tener en cuenta a grupos marginados socialmente, como las mujeres jóvenes negras o asiáticas y a la comunidad LGBTQ+. Señaló que los estudiantes que se sienten apoyados y seguros en la escuela tienen menos probabilidades de experimentar ideas suicidas y conductas autodestructivas. También expresó su preocupación por actos de violencia anti-LGBTQ+ en las escuelas y los ataques que sufren los estudiantes por parte de algunos padres durante las reuniones escolares. En California, se ha creado una línea de recursos llamada, California vs Hate (California vs El odio) para denunciar actos discriminatorios y obtener apoyo.

Los tres principales objetivos de esta línea son: informar a las personas sobre sus opciones si son víctimas de odio, proporcionar recursos culturalmente competentes y brindar servicios de coordinación de atención. Por último, destacó que los jóvenes han mostrado solidaridad entre diferentes comunidades y rechazó al supremacismo blanco, recordándonos nuestra humanidad común y nuestro interés compartido en luchar unos por otros.

Por su lado, Dashka Slater, escritora y periodista del New York Times, habló sobre su trabajo alrededor del tema. Por ejemplo, el libro Accountable (Responsable), basado en hechos reales, narra la historia de una cuenta racista en las redes sociales que cambió la vida de varios adolescentes. Discutió sobre Autobús 57, una historia sobre acoso y odio hacia una joven de identidad no binaria, en la que analiza los orígenes y los impactos que tiene la violencia en la sociedad. 

En Albany, un estudiante coreano-estadounidense creó una cuenta racista en Instagram, en la que atacaba a las chicas negras de su escuela. El descubrimiento de la cuenta provocó una ruptura masiva en la comunidad, especialmente entre las niñas atacadas, quienes se sintieron traicionadas por personas en quienes confiaban, lo cual desencadenó una manifestación en la escuela donde se demandó libertad de expresión, contó Slater. Adicionalmente, compartió algunas estadísticas sobre lo que sucede en la web. Se estima que entre 3 y 4 jóvenes estadounidenses han experimentado situaciones de racismo, de los cuales el 15% sufrieron acoso en línea; aproximadamente, la mitad de dicho contenido extremista, se centra en la raza o el origen étnico. 

Estas estadísticas invariablemente se filtran en la vida real, uno de cada cuatro estudiantes de entre 12 a 18 años, ha vivido situaciones de odio, a través de palabras o símbolos escritos en sus escuelas. Alrededor de 1,3 millones de estudiantes fueron intimidados debido a su aspecto o su identidad durante el año escolar 2018-19. Los estudios demuestran que tanto el acosador como el acosado, experimentan efectos intensos y difíciles de tratar a largo plazo. “En gran parte, se debe a la exposición online de los niños a grupos extremistas que promueven el odio y la discriminación con cuidado y deliberación”, señaló Slater. 

Connie Alexander-Boaitey, Presidenta de la Asociación Nacional para el Progreso de las Personas de Color (NAACP) de Santa Bárbara, dijo que en el informe anual del departamento de Justicia de California, reportó que jóvenes afroamericanos   están experimentando los niveles más altos de odio. Compartió que “la primavera pasada del 2022, un joven fue agredido en una escuela intermedia, por motivos raciales, y la palabra N fue usada por estudiantes latinos contra los estudiantes afroamericanos; mientras brincaban sobre el joven, cantaban el nombre de George Floyd”. Insistió en que todos los días debemos comprender la relación entre la salud mental y la alta tasa de intentos de suicidio. Alrededor del 10% de los jóvenes de color en algún momento consideran el suicidio o lo intentan, en comparación, los jóvenes blancos lo consideran solo en un 4.5%. En este sentido, destacó que la lucha real está en los líderes dentro de la comunidad hispana, por lo que hizo un llamado a sentarse y tener conversaciones sobre lo que está sucediendo. 

Mina Fedor, fundadora y Directora Ejecutiva de AAPI, Juventud en ascenso, expuso que “los principales objetivos son defender la educación, promover comunidades más seguras y saludables y también unirse contra todas las formas de odio a través de la construcción de coaliciones, el compromiso cívico y el aumento de voces argumentales”. Compartió su propia experiencia, “cuando estaba en la escuela secundaria y los jóvenes asiático-americanos también estaban siendo atacados, escuché comentarios que me hicieron sentir muy inseguro de mi identidad como asiático-americano, así que decidí hablar sobre la xenofobia de la que había sido testigo y organicé un pequeño grupo para solo 70 personas y terminaron asistiendo 1,200 a una demostración”. Ese día Fedor, notó que puede ”marcar la diferencia tomando estas pequeñas acciones y es que la gente realmente quería escuchar algunas de estas perspectivas de jóvenes, especialmente de asiáticos-americanos y de ahí se formó Youth Rising”.

El acoso hacia los asiáticos también puede provenir de la misma comunidad, en ocasiones manifestándose como burlas y menosprecio hacia otros grupos AAPI. Sin embargo, es importante no generalizar este comportamiento a toda la comunidad estudiantil asiática. Se debe promover un ambiente inclusivo donde todos los estudiantes, sin importar su origen cultural, sean respetados y valorados por igual, concluyó Fedor. 
Anahí Santos, Coordinadora de Bienestar Juvenil y One Community Action, originaria de la mixteca oaxaqueña, expuso que los latinos están intimidando a los jóvenes indígenas llamándolos “oaxaquitas”, haciendo referencia al lugar del cual ella es originaria. California es un estado muy diverso donde convergen distintas etnias indígenas de México. Para Santos, actualmente se está experimentando una reestructuración en lo que significa ser latino. Por un lado, parece que estamos limitando nuestra conexión con nuestras tradiciones ancestrales e indígenas. Pero nos entusiasma darle la bienvenida a todos aquellos que deseen aprender y comprender nuestras costumbres de manera correcta, sin importar si son latinos o no, si tienen raíces indígenas o no. Es fundamental que las personas comprendan adecuadamente el contexto cultural para evitar estereotipos y discriminaciones injustas, ya que esto puede influir en los ingresos económicos de algunos individuos.

En conclusión, Santos añadió que son defensores firmes de los estudios étnicos porque creen en su poder transformador. Quieren construir una sociedad inclusiva donde cada individuo se sienta orgulloso de su identidad cultural y tenga igualdad de oportunidades. Juntos pueden superar las adversidades y construir un futuro brillante para todos.