La discriminación en los adultos mayores | Molino Informativo

La discriminación en los adultos mayores

by | Jul 26, 2022 | Comunidades

El edadismo cotidiano es estereotipar o discriminar a las personas debido a su edad y cobra mucha importancia, especialmente, para personas mayores de 50 años. El 93% de los adultos mayores dicen que se han enfrentado alguna forma de discriminación por edad, informan los titulares de la revista AARP News, en donde se cuestiona si el presidente Biden es demasiado viejo para postularse para un segundo mandato, así como sobre la salud mental de la senadora Diane Feinstein.

Cabe resaltar que las mujeres sufren de manera desproporcionada el sesgo relacionado con la edad, especialmente en el lugar de trabajo, y que esta discriminación por edad tiene impactos dañinos en la atención médica. De estos puntos se habló en la conferencia semanal de Ethnic Media Services.

La doctora Julie Allen, profesora adjunta asociada del Centro de Investigación de Dinámica de Grupos, del Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad de Michigan inició la conferencia diciendo que los casos graves de discriminación por edad están bien establecidos y tienen resultados específicos, como ser obligado a jubilarse o abandonar su hogar antes de que una persona incurra en otra forma de discriminación. Las personas dan por sentado que todos los adultos mayores tienen problemas de memoria o pérdida auditiva, desafortunadamente hay mucho menos  investigación sobre las implicaciones para la salud de esta exclusión, o sobre la discriminación cotidiana en oposición a otra discriminación, como el racismo, el sexismo o la homofobia.

A través de la encuesta nacional descubrieron que más del 93% de los adultos en este rango dijeron que experimentan regularmente uno o más de estos tipos de discriminación debido a su edad. Algunos grupos experimentan más discriminación que otros, por ejemplo, aquellas personas entre 65 y 80 años, más que aquellos que tienen entre 50 y 64 años. La discriminación diaria aumenta el estrés de adultos y esto parece contribuir a un envejecimiento acelerado, el riesgo de contraer ciertas enfermedades, además de la mortalidad prematura y  por último, Allen afirmó que el envejecimiento y la discriminación “están incrustadas en el sistema, por lo que los adultos mayores reciben peor cuidado que la gente más joven, esto incluye presunciones entre los proveedores de cuidado”.

Por su lado la doctora Louise Aronson, geriatra y profesora de medicina en University of California San Francisco y finalista del premio Pulitzer por su libro Vejez: redefiniendo envejecer, transformando la medicina y reimaginando la vida, se enfocó en el desproporcionado impacto de la discriminación por edad en las mujeres.

Señaló que existen datos recientes que muestran que en 2016, entre las personas de 65 años en adelante había 79 hombres por cada 100 mujeres, y a pesar de las variantes anuales de estas cifras, aseguró estos números fueron cambiando debido al COVID-19, que mató más mujeres. Para Aronson, el efecto de la discriminación va en aumento y no se trata solo del género o el sexismo, se trata de una tercera categoría más importante, además de la parte financiera, ya que, por ejemplo, las mujeres ganan menos dinero que los hombres en general.

Por otro lado, las mujeres negras y latinas ganan sólo el 65% de lo que gana un hombre blanco por hacer exactamente el mismo trabajo y tener exactamente el mismo nivel de educación, incluso las mujeres negras con títulos avanzados, tan sólo ganan el 70% de lo que gana un hombre blanco, por lo que financieramente ingresan a la vejez con menos pensión.

La segunda causa de discriminación es la apariencia que impacta a las mujeres menores de 35 años. “La importancia de la apariencia juvenil y atractiva es importante, mucho más para las mujeres que para los hombres y eso tiene efectos negativos de tres maneras, hay mucha presión para que las mujeres se vean jóvenes, como teñirse el cabello o las cirugías estéticas, genera estrés ya que de no hacerlo pierden la autoestima y la confianza” asegura también Aronson.

Además, las mujeres son mucho más propensas a ser cuidadoras informales, de hecho, la mayoría de los cuidados en este país lo realizan mujeres y el 90% de ellas son mal remuneradas, incluso después de la jubilación. Son ellas las que hacen la mayor parte del trabajo del hogar, todos estos factores afectan la salud y la vejez.

Y finalmente subrayó que en los Estados Unidos hay una estadística que indica que el género y la igualdad en la salud, a medida que se envejece, son influenciados fuertemente por dos cosas: el nivel de educación y el estilo de vida saludable.

Por su parte Paul Kleyman, coordinador nacional de Journalists Network on Generations y editor de Generation Beats Online, hizo comentarios acerca del impacto de la discriminación por edad en la política. “La discriminación dijo es como una cucaracha que nunca desaparece o que nunca deja de reagruparse y vuelve como las tropas de Putin”.  El sesgo de edad es particularmente pernicioso porque, como lo vemos ahora, incluso los medios liberales se asustan con un presidente que querían pero que ahora temen que sea demasiado mayor para volver a ganar. Tal y como lo hizo la revista New York Magazine en un artículo el mes de junio, en el cual se hizo referencia a la senadora, especulando sobre sus aparentes problemas de memoria y culpar así, a todos los viejos líderes por el estancamiento de Washington. 

“La falla radica más en nuestra falta de imaginación sobre las soluciones prácticas a largo plazo, que hablan sobre los derechos de voto, el dinero y la lucha contra la manipulación partidista en lugar de atender la intolerancia de la discriminación por edad, especialmente los periodistas y los medios de comunicación que tienen la oportunidad de traer una nueva perspectiva de este país que incluye la exploración de alternativas que se ajusten a nuestra nueva era de longevidad”, afirmó Kleyman.