¿Por qué América Latina es tan importante para Estados Unidos? | Molino Informativo

¿Por qué América Latina es tan importante para Estados Unidos?

by | Jun 23, 2022 | Comunidades

En el marco de la Cumbre de las Américas, celebrada en Los Ángeles en días pasados donde el presidente estadounidense Joe Biden se reunió con varios países, aunque sin la presencia de países clave como México, Cuba, Honduras y Venezuela, y que tuvo como resultado la Declaración sobre Migración y Protección, la cual fue firmada por al menos 20 países para crear –aparentemente– mejores vías legales para migrantes y refugiados, así como la creación de fondos para los países receptores de estos.

Sandy Close, directora de Ethnic Media Services, inició la conferencia semanal, diciendo que durante décadas, América Latina ha estado en la periferia del pensamiento de la política exterior de Estados Unidos, “como si pudiéramos aislarnos de todo el sur de la frontera construyendo un muro”. Lo que es real, es que la región está experimentando grandes transformaciones con repercusiones para todo el continente: del cambio climático y la creciente brecha de riqueza a la normalización de los cárteles y un nuevo y aparente giro político hacia la izquierda partidista. Mientras tanto, China, Irán y otros países están profundizando sus apuestas estratégicas en la región. En esta ocasión, analistas y periodistas hablaron sobre ello.

De acuerdo con Ariel Ruíz Soto del Instituto de Políticas Migratorias (MPI), con sede en Washington, existe un panorama muy importante de flujos migratorios internos en América Latina, como por ejemplo, el de migrantes de Nicaragua a Costa Rica, por otro lado, migrantes haitianos que se han asentado temporalmente en Chile, Brasil, Ecuador y otros lugares sin dejar lado a los venezolanos y cubanos, muchos de estos últimos junto a los centroamericanos han conformado las caravanas que cruzan México para intentar entrar a Estados Unidos.

De octubre de 2021 a abril de 2022 hubo 1.3 millones de encuentros de personas con las autoridades migratorias, de ese número el 61% de esos encuentros fueron de migrantes de México, Guatemala, Honduras y El Salvador, y el 39% restante son de otras partes del mundo.

Según un estudio del MPI los sistemas en la región no están equipados para lidiar con la diversidad y magnitud de lo que está pasando. México en ese mismo periodo tuvo 198 mil migrantes, aproximadamente el equivalente, en términos de la propagación de migrantes, del ranking de los países que migran a Estados Unidos.

México ocupa la posición número uno, seguido de Guatemala, Honduras, Cuba y Venezuela. México recibió 231 mil solicitudes de asilo en 2021 que lo pone en el tercer lugar en el mundo en recibir solicitudes de asilo, aclaró que no todos los que vienen a México califican para este tipo de protección, muchos de ellos están buscando protección para quedarse allí o temporalmente.

Venezuela ha expulsado al menos 6 millones de personas que se han desplazado en América Central y Estados Unidos, antes de la pandemia entre 2015 y 2019, vimos que México y los Estados Unidos deportaron a 1.1 millones de migrantes provenientes del Salvador y Guatemala.

Y aunque las caravanas migrantes han disminuido continúa siendo un problema para las autoridades migratorias. “De igual manera no olvidemos que los niños son el principal componente de estas migraciones” aseguró Ruiz, y concluyó mencionando los tres pilares en los que se basó la declaración de la Cumbre, para tener mejor control en la migración: es necesario, primero, crear estabilidad y asistencia para comunidades que reciben migrantes como alimentos y albergues, segundo, dar protección legal no necesariamente significa ser refugiado pero si una combinación como estadía temporal o permanente, y, finalmente, hacer que las administraciones de la frontera sean más humanas, ya que se ha visto encuentros muy violentos entre las caravanas y las autoridades migratorias.

Christine Folch, profesora asistente de Antropología Cultural y Ciencias y Políticas Ambientales de la Universidad de Duke, participó también en este panel, especialista en el estudio del agua y las energías renovables, señaló que América Latina es líder si hablamos de transiciones energéticas: los Estados Unidos obtienen casi dos tercios de la electricidad consumida quemando combustibles fósiles, mientras Latinoamérica produce el 29% de combustibles fósiles, 2% de energía nuclear y el 69% de energías renovables.

Folch habló sobre la central hidroeléctrica de Itaipú, una de las más grandes del mundo, ubicada en la frontera con Brasil y Paraguay, que produce suficiente energía como para abastecer un tercio de California o una cuarta parte de Texas. Esta represa hidroeléctrica tiene una capacidad instalada de 14 mil megavatios en comparación con las tres gargantas de China que está en 22 mil megavatios.

Algo importante que debemos saber es que la Unión Europea (UE) desciende legalmente de los acuerdos de carbón y acero entre Alemania Occidental y Francia, mientras que el Mercosur, que es el mercado común del Cono Sur, desciende legalmente del tratado que se estableció entre Brasil y Paraguay, lo que significa que la gestión del agua y los recursos hídricos en América Latina tienen el mismo tipo de energía generativa. Según Folch este acuerdo puede ser una estructura similar en la región que desafía el impacto del cambio climático. Remarcó que durante la Cumbre los temas abordados fueron cuestiones de política más agudas en torno a la migración y la corrupción y pareciera que América Latina como líder del cambio climático no está como prioridad en la agenda.

Así mismo, se contó con la presencia de Ted Lewis coodirector de Global Exchange, quien afirmó que es importante recordar “la división entre los líderes, particularmente, sobre la postura del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien dejó claramente su política de no alineación en el hemisferio, es decir su independencia de la política exterior con respecto a Estados Unidos”.

“Todo este proceso –continuó Lewis– de la Cumbre es parte de un panorama político mucho más amplio y que ha sido tradicionalmente uno de los lugares en los que Estados Unidos ha intentado dominar y lo ha hecho durante décadas”. Después del colapso de la década de 1980, México tuvo una política exterior independiente, aunque quedó bajo el control de la Doctrina de Seguridad Nacional en la cual se pasó de ubicar la amenaza comunista a la amenaza de las drogas.

Fue la ideología de la guerra contra las drogas la continúa afectando a la región y a la narrativa mental que la mayoría de nosotros tenemos de América Latina en general y a México en particular. El titular de Global Exchange concluyó diciendo que “la administración de Biden debe reconocer que no va a haber cambios en cuanto a inmigración porque políticamente es un desastre, y mientras Estados Unidos sostiene la narrativa de ser el líder del hemisferio, los demás debemos estar atentos de que esa perspectiva debe ser cambiada”.

Finalmente, el fotoperiodista mexicano Manuel Ortiz de Península 360, narró desde sus experiencias a través de sus coberturas recientes en Colombia, la situación de aquel país, dijo que ha visto, “la creación de nuevos movimientos sociales nuevas plataformas y nuevas alianzas entre estos movimientos de diferentes sectores, que servirán para seguir impulsando el cambio social sin importar quien esté en el gobierno”.

Por otro lado también comentó que Colombia es el segundo lugar en el mundo en términos de desplazamientos internos, la mayoría de gente desplazada va a las ciudades sobre todo Cali y Medellín y la gente joven que vive en los vecindarios son hijos de los desplazados. Las elecciones del pasado fueron decisivas para comenzar con un nuevo proceso político y social en que se tendrá un gobierno que no proviene de las élites de derecha que siempre han gobernado este país, por lo que ahora la atención estará mucho sobre el nuevo gobierno de Gustavo Petro y Francia Márquez.