Representamos las voces de las abuelas: Francia Márquez | Molino Informativo

Representamos las voces de las abuelas: Francia Márquez

by | May 30, 2022 | Colaboraciones especiales

Por Alina Duarte, Irma Gallo y Heriberto Paredes

A Francia Márquez Mina, compañera de fórmula de Gustavo Petro por el partido colombiano, Pacto Histórico, la han amenazado de muerte en varias ocasiones. Ninguna amenaza, en un país en el que seis candidatos presidenciales han sido asesinados, debe tomarse a la ligera. Mujer originaria del Cauca, que limpió casas para mantenerse, que estudió derecho por las noches, madre soltera de dos hijos, ha recibido ataques racistas (una cantante y conductora de televisión la llamó King Kong en un tuit) y varias amenazas de muerte.

Activista medioambiental, Márquez, nacida en Yolombó, gracias a la defensa del agua en su comunidad, ha sido reconocida múltiples veces por preseas tan importantes como el Premio Nacional a la Defensa de los Derechos Humanos en 2015 y el Premio Goldman para el Medio Ambiente en 2018. A ello suma los derechos de las mujeres, “para que las mujeres podamos salir a la calle sin miedo a ser violadas, a ser asesinadas”.

Por su parte, el senador Alexander López, precisó algunos datos para comprender la magnitud del enojo en que se encuentra la sociedad colombiana: “Hemos pasado más de 50 años de violencia, más de 200 mil muertos, más de 90 mil desaparecidos, el conflicto interno en Colombia ha generado más de 9 millones de desplazados y más de  medio país es víctima de la violencia. Más de 1200 líderes sociales asesinados en este gobierno que acaba, ¿y quiénes eran estos líderes, son los líderes comunales, los que defienden el medio ambiente, los que defienden el río, los que defienden a los trabajadores. Este es un momento definitivo para nosotros”.

Tras el resultado electoral de la primera vuelta de las elecciones, llevadas a cabo el pasado 29 de mayo de 2022, con el reto de vencer a un sector empresarial y conservador, las palabras de Márquez cobran mayor relevancia, y aquí presentamos su entrevista:

¿Cuál es la importancia de que Francia Márquez, mujer afrodescendiente, llegue a la vicepresidencia?

Yo no sólo soy una mujer negra, soy una mujer afrodescendiente que ya tiene una historia de lucha y de resistencia encima que no empezó conmigo, que empezó con mis abuelos y abuelas hace muchos años desde que nos trajeron a este continente en condición de esclavitud. Desde ahí mi pueblo ha estado luchando por libertad y por dignidad. Y la lucha que hoy encarnamos de ocupar la política, de ocupar el poder del Estado es la continuidad de esa lucha histórica.

Es la lucha de los pueblos colombianos, de los movimientos sociales que históricamente han querido un cambio en este país pero que los han matado por eso, que los han asesinado, que los han violentado, que los han desterrado, que los han expulsado, incluso, de este país.

Entonces, encarnamos la lucha de un pueblo sufrido, el pueblo colombiano que ha sufrido enormemente el racismo, la exclusión, la imposición de un modelo económico que nos vendieron como el desarrollo pero al contrario nos ha llevado a un camino casi que inviable como sociedad al tener que terminar asesinándonos entre colombianos y con una guerra sostenida hasta ahora.

Entonces, representamos las voces de las abuelas que quisieron un cambio para este país; muchas se murieron esperando el cambio, otras ahora dicen: pensé que me iba a morir y no iba a llegar a ver el cambio, así que estamos aquí en una lucha por la dignidad y la justicia de nuestro pueblo, de hombres y mujeres que han luchado históricamente por igualdad, por la paz, por la justicia social, por la dignidad humana, por la lucha por cuidar el territorio como un espacio de vida, la casa grande, el útero mayor.

En Colombia, ¿cómo transformar la relación que se tiene con el territorio en función de una defensa, ya que hay muchas afectaciones, como las ocasionadas por las empresas mineras? ¿Cuál va a ser este cambio de modelo a nivel nacional?

Nosotros vamos a transformar un modelo de desarrollo por el cual esclavizaron a mi pueblo. A la gente negra que trajeron a América Latina, y sobre todo a Colombia, la trajeron para trabajar en las haciendas esclavistas y en las minas esclavistas. El modelo económico extractivista que esclavizó a mis abuelos y abuelas.

Transformar ese modelo es el camino hacia la libertad, pero ese mismo modelo de desarrollo hoy tiene la vida en el plantea agotándose, tiene extinguiéndose la vida todos los días y pues creíamos, como humanidad, que éramos dueños del planeta, pero nos damos cuenta –y la pandemia nos puso en evidencia de que no somos dueños de nada– de que somos un eslabón más de esa cadena de la vida.

Desde muy chiquita, mis abuelos me enseñaron que el territorio es un espacio de vida, a mí me enseñaron en el norte del Cauca que la libertad no es posible sin territorio. Libertad y autonomía se ejercen el territorio, no es posible la identidad cultural y étnica sin territorio.

Entonces cuando estamos hablando aquí del cuidado del territorio como un espacio de vida es porque la política hegemónica, patriarcal, neoliberal, vio el territorio como un espacio de riqueza acumulativa y esa riqueza acumulativa basada en un modelo extractivista, hoy nos ha llevado a las enormes desigualdades que hay, no sólo en Colombia sino a nivel global.

Fuera de Colombia, no se sabe qué significa este lema de Vivir Sabroso

La élite, ahora que nosotros pusimos este lenguaje que era un lenguaje popular que estaba en nuestra comunidad, que estaba en lo cotidiano, ahora que lo pusimos en la política, han intentado desvirtuarlo diciendo que vivir sabroso es como vagancia y que queremos todo regalado y pues no. Vivir Sabroso ha sido para nuestro pueblo vivir en comunidad, vivir en una construcción colectiva de vernos como familia extensa, vivir con la naturaleza reconociendo que somos parte de ella y en armonía, si nosotros como pueblo establecimos reglas de relacionamiento con la naturaleza, vivir sabroso es parar la guerra en este país, es vivir sin miedo, es que las mujeres no tengamos miedo de ir la esquina porque sentimos que nos van a violar o que nos van a matar. Que [a] los jóvenes no le saquen los ojos por reclamar educación en este país.

Vivir sin miedo es vivir con derechos, es vivir en paz, es vivir con alegría, es poder expresar el arte, la cultura, el deporte, es poder disfrutar de toda la riqueza de la biodiversidad que tenemos en este país, eso significa vivir sabroso y bueno, nosotros lo hemos disfrutado en el Pacífico colombiano cuando tocamos una marimba.

Cuando compartimos un plato de comida que ha sido preparado con productos que son del mismo territorio, cuando tenemos la posibilidad de ir y coger el atarraya y coger un pescado. Y no significa que tenemos que tener plata primero para comer. Nosotros podíamos comer en nuestro territorio sin tener la necesidad de tener dinero. Poder vivir con la puerta abierta, que uno no sienta que tengo que estar encerrado todo el tiempo, es poder vivir en libertad y esa libertad.