18 de Enero, 2020.– En un hecho sin precedentes y gracias al trabajo del Concejo de Pueblos Originarios viviendo en Nueva York, se estableció una mesa de trabajo entre integrantes del Concejo de los Pueblos Originarios viviendo en Nueva York y funcionarios del gobierno del Estado de Guerrero.
La Secretaría de Migrantes y Asuntos Internacionales dio formalidad al encuentro con el oficio No. SEMAI/DGV01/018/2022 y la representación de Alondra García. Por parte de la Secretaría de Asuntos indígenas y Afromexicanos, estuvo el Licenciado Pánfilo Sánchez Almazán. También estuvo presente la presidenta de la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Guerrero, Cecilia Narciso.
En ésta importante reunión se dio paso a las voces de los Guerrerenses que radican dentro y fuera del territorio nacional, con el propósito de establecer los mecanismos de diálogo que fortalezcan los vínculos de trabajo y colaboración y dar seguimiento y análisis a las propuestas del Concejo de los Pueblos Originarios, el Movimiento Social Cultural Ti Toro Miko y la Red de Pueblos Transnacionales.
En una primera intervención, Yoloxóchitl Marcelino Cano, por parte del Concejo, expuso de manera urgente la necesidad de una Casa Guerrerense en la Ciudad de Nueva York; señalando que desde la conformación del Concejo de los Pueblos Originarios, el día 18 de diciembre del año 2020, se han visto las diferentes injusticias que padecen los Guerrerense en ésta ciudad. De acuerdo con el Concejo, La casa Guerrerense en Nueva York tendría la función administrativa y la capacidad jurídica para resolver violaciones a los derechos humanos de los migrantes Guerrerenses.
Por su parte, Zenaida Cantú Aburto urgió a las autoridades la certificación de los intérpretes indígenas. Cantú dijo que son ellos y ellas “los que asisten a las personas que hablan su lengua materna de sus lugares de origen, principalmente de la montaña alta de Guerrero, en las diferentes instancias públicas y de gobierno”.
En la voz de Elías Hilario Guzmán, también concejero migrante indígena, se mencionó que una Casa Guerrerense sería una forma de atención de manera oportuna “a las necesidades que surgen cuando hay una tragedia y sobre todo, para la repatriación gratuita y sin tanta burocracia a los Guerrerenses”.
El Concejo de los Pueblos Originarios agradeció a los funcionarios la disposición de éste primer acercamiento. Saúl Quizet Rivera, concejero y fundador del grupo cultural TiToro Miko, también hizo mención que es necesario crear políticas públicas para frenar la migración, principalmente de la gente de la montaña alta de Guerrero.
Por su parte, el maestro Simitrio Guerrero, representante de los pueblos indígenas de la montaña alta, puso en manifiesto que también es necesario una casa del migrante en la ciudad de Tlapa de Comonfort, Guerrero, toda vez que ésta región es mayoritariamente indígena y son ellos y ellas quienes más emigran. Ésta casa tendría como función la promoción de la cultura y las artes, así como la implementación de proyectos productivos para evitar la migración de más Guerrerenses.
Por su parte, los funcionarios fijaron una fecha tentativa para el seguimiento de ésta mesa de trabajo para el día 8 de febrero del presente año. Una vez que hayan coordinado de manera interinstitucional a través de los titulares de las secretarías y dar respuesta a los primeros avances.