Del mar al mundo: Héctor Careaga Martínez capta la comunidad afrodescendiente en Tamiahua | Molino Informativo

Del mar al mundo: Héctor Careaga Martínez capta la comunidad afrodescendiente en Tamiahua

by | Ago 11, 2024 | Molino Impreso

Héctor Careaga Martínez, un joven afrodescendiente de Tamiahua, Veracruz, estaba graduándose de la escuela secundaria cuando su abuelito Santiago le regaló una cámara.

Desde que era un niño, Careaga ha trabajado en el restaurante que ha pertenecido a su familia por tres generaciones, llamado “El Sabor del Mar”. Desde joven edad, Careaga aprendió a cocinar varias recetas de comidas con diferentes tipos de pescado, camarón y los productos del mar. Un joven indígena por parte de su familia materna, originarios de Santana Cempoala, Careaga también aprendió recetas indígenas, unas con influencia de la comida africana y huasteca.

Su abuelito, Santiago, quería abrir más el mundo para su nieto.

“Me invitó a un viaje”, comenta Careaga. Un viaje en que él pudiera explorar todo el estado de Veracruz armado con esta cámara, una de rollo, con la que pudiera captar lo que viera.

Careaga compró más rollos para la cámara y entonces salió, solo, de Tamiahua. Tras su retorno, empezó a revelar las fotos del viaje. 

“Y hubo algunas que no estaban horrorosas,” Careaga me dijo, riendo. “Había algunas muy padres, otras muy bonitas”. Dice, ‘oye, no está nada mal, ¿no?’.

Cuando Careaga era un niño, le detectaron una deficiencia de atención. En la escuela, Careaga tenía dificultad con sus estudios y leyendo libros. La fotografía se le presentaba como una habilidad nueva en la que pudiera mejorarse. Animado a practicar su fotografía, Careaga siguió tomando fotos en Tamiahua. “Estuve un buen tiempo con esa cámara”, recordó. Después, su mamá le ayudó a comprar una cámara semiprofesional, para captar fotos de mejor calidad.

“Desde niño, siempre mi familia me ha apoyado muchísimo. Gracias a Dios que pude estar aquí en la familia, con ellos,” siguió contando, pausando para contener sus emociones.

“Una persona muy importante para mí –continúa– es mi abuelito Santiago. Siempre me ha apoyado. Desde pequeño él me empezó a enseñar a hacer licuados. Mi abuelito perdió su vista, y por aquí se sentaba. Ya de niño, más que nada, [me enseñó] estar activo, no estar haciendo nada”.

“Mi familia, radicalmente, siempre han estado muy contentos de lo que yo hago. Siempre me han apoyado incondicionalmente como parte de la familia, por mi papá y por parte de la familia de mi mamá”.

Casi dos décadas más tarde, Careaga es un fotógrafo establecido en Tamiahua, Veracruz, donde nació y todavía vive.

El cariño de él hacia su hogar, Tamiahua, es evidente en su fotografía. Los temas principales de su fotografía son la comida indígena y huasteca, la naturaleza y los paisajes de Tamiahua, y las vidas de mujeres indígenas y afrodescendientes.

Careaga se identifica como afro indígena, por parte de su madre. Esta identidad, durante su niñez, fue explorada a través de las historias que su abuelito Santiago le dijo cuando era un niño para tranquilizarse.

“Mi abuelito me platicaba sus historias, anécdotas de Tamiahua, esta parte de la identidad”, comenta. “Yo las escuchaba, y me empezaba a imaginar. También, por parte de mi abuela, iba a empezar a cocinar. Empezaba a cocinar camarones, todas esas comidas que se hacían aquí”.

Careaga es parte del colectivo Afro-Tamiahua, compuesto por personas creativas donde se pueden compartir sus obras de arte y fotografías. Todas las obras del colectivo llevan el tema de la cultura e historia de los afrodescendientes que viven en Tamiahua.


Tamiahua es considerado un pueblo afrodescendiente, según el censo de 2020 en el que la mayoría de la población se consideraba afrodescendiente. El pueblo ha sido un crisol de culturas desde la época de colonización, durante la cual muchas personas africanas e indígenas fueron esclavizadas ilegalmente en Veracruz. Actualmente en este estado existe una mezcla de comida y cultura que el colectivo desea destacar, así como una historia que honra. 

“[El colectivo] empezaba a hacer este trabajo con la fotografía también, y la fotografía tiene una gran fuerza, que si la sabes utilizar, qué padre, ¿no? Hacemos campañas de fotografía en Instagram y Facebook, de actividades y eventos en Veracruz para la comunidad, eventos internacionales de mujeres afrodescendientes”.

En el 25 de julio, el día internacional de la mujer afrolatina, el colectivo planea honrar a la mujer tamiahuense. “Es un trabajo muy fuerte, el que hace ella. Son las mujeres que desmenuzan el pescado y lo cocinan. Venden camarón, también pescado. Los secan. Lo procesan en bolsas para poderlo vender”.

A través del colectivo, Careaga podía aprender más de la fotografía y cómo editar las fotos. “Tuve clases, veía más tutoriales. Estoy muy agradecido al colectivo, que me ha dado un gran panorama”.

Careaga es un buen observador del mundo a través del lente de su cámara. Él nota las aves migratorias, y capta fotos de cuando migran y llegan. Careaga capta fotografías de los pescadores cuando trabajan en el mar, de los manglares, de la iglesia, de las fiestas patronales de Tamiahua. Sus fotos están llenas de color, las de la comida y las de paisajes vastos.

“La idea que yo también tengo con la fotografía en lo personal es darle otro giro a la foto, y que lo vean tanto como lo actual y como lo viejo, ¿no? Darle un toque, darle un acabado”, agrega Careaga. 

Careaga ha tenido varias carreras y trabajos para apoyar su pasión por la fotografía. Mientras está trabajando como fotógrafo, también ha enseñado clases de cocina en la universidad local. Además, recientemente, Careaga aceptó la posición de director de turismo en Tamiahua. “Pues, me adapto a las circunstancias, no? He hecho un poco de todo. He dado clases en una prepa técnica, estuve trabajando en una maquiladora también”.

Con su trabajo como director del turismo, Careaga ha encontrado que le da una forma en que puede elevar la cultura indígena y afrodescendiente de Tamiahua.

“Hay otra pintura que es una línea de tiempo y marca más o menos los pasos de cómo llegaron las personas esclavizadas de África, y cómo nuestra comunidad afrodescendiente es hoy”, señaló. Careaga publicó la pintura en las redes del departamento de turismo para compartir esta historia.

Le pregunté cuáles son sus comidas favoritas de Tamiahua.

“A mí me gusta mucho la machuca, la machuca es esa base de plátano con manteca de puerco, cebolla, y rajita de chile. Esa también es una comida muy vieja,” me contestó. “El tocón, hay molito de pescado también. Camarones al mojo. Las torrejas, las conservas con yuca, o también de ciruela. Son muy típicas de aquí”.

Para Careaga, la fotografía, más que una representación de su hogar, es una forma en la que puede conectar de una manera íntima con la comunidad de Tamiahua.

“Me ha conectado mucho con esta parte de la fotografía, que como que es una interacción con la gente”, señaló el fotógrafo afroindígena.

“Voy a visitar a la persona, platico, conecto con la persona, porque tomo las fotos y no nada más es tomarlo, sino que sacarle esa chispa a la gente, una risa o algo en particular. Hace que cambie radicalmente la foto”.

Además, la gente de Tamiahua puede reconocerse en las fotos de Careaga. Reconocen en las fotos a la hija de su amiga, las señoras en la calle, la comadre, la vecina.

“Yo dije, eso era lo que yo quería. Que conectaran. Que dicen, wow, estoy en Tamiahua y ya hay fotos de allá, de mi comunidad”.

** Tamiahua, Veracruz. Fotografía de Héctor Santiago Careaga Martínez.