El crecimiento urbano ha generado que los árboles y espacios verdes sean considerados meramente decorativos, sin embargo, cada vez es más urgente reconocer su impacto en la salud y en la supervivencia. Aunque las autopistas y las palmeras son emblemáticas de la ciudad de Los Ángeles, nuevas investigaciones y la urgencia del cambio climático, demandan más espacios verdes y acceso a los parques. Por lo tanto, es crucial explicar el vínculo entre espacios verdes y salud humana, así como, trazar un plan detallado para implementar cambios benéficos en toda la ciudad. Los Ángeles puede ser un ejemplo para otras urbes.
En la rueda de prensa convocada por Ethnic Media Services el 01 de diciembre, expertos analizaron la importancia ecológica y el vínculo entre espacios verdes y salud humana en zonas urbanas. El profesor Michael Jerrett, del Departamento de Ciencias de la Salud Ambiental y Co-Director del Centro para Soluciones Climáticas Saludables en la Escuela de Salud Pública Fielding, señaló que los árboles en las zonas costeras ofrecen una amplia gama de beneficios para la salud humana. Sin embargo, existe evidencia en Los Ángeles que sugiere que los espacios verdes y el acceso a parques son peores en áreas con bajos ingresos y amplia población latina. Estas desigualdades contribuyen a la disparidad poblacional de la ciudad.
Según una investigación de la Escuela de Salud Pública Fielding de UCLA, aumentar el espacio para parques podría agregar casi un millón de años de esperanza de vida en el condado de Los Ángeles y mejorar la calidad de vida de residentes de bajos ingresos y comunidades minoritarias. Se ha encontrado evidencia de que estar en contacto con la naturaleza reduce trastornos como el déficit de atención, la hiperactividad, enfermedades cardiovasculares y respiratorias, depresión e incluso disminuye el bajo peso al nacer. Además, mejora el bienestar y la felicidad medida a través de escalas validadas. Del mismo modo, mejora el desarrollo cerebral y el rendimiento de los niños.
Rachel Malarich, la primera Oficial Forestal de la ciudad de Los Ángeles, quien se encarga de tratar los árboles como infraestructura viva, promover políticas y prácticas que garanticen copas de árboles más abundantes y saludables para los residentes. Uno de los proyectos clave en los que trabaja es el plan de gestión de bosques urbanos, que aborda temas como el mantenimiento de los árboles existentes y preservar sus beneficios a largo plazo. Malarich destacó la importancia de involucrar a la comunidad y educar a los residentes sobre el valor de los árboles en sus vecindarios.
Enfatizó que la visión futura es lograr una ciudad más saludable a través del aumento del hábitat para la vida silvestre y la mejora de las condiciones ambientales. Maralich compartió que desde la oficina federal están llevando a cabo talleres comunitarios para obtener comentarios directos de los residentes y están traduciendo materiales a varios idiomas según las necesidades. Además, colaboran con asociaciones locales para adoptar mejores prácticas y garantizar un enfoque regional coherente en el cuidado y manejo de los árboles.
La estrategia incluye consideraciones sobre equidad distributiva, asegurándose de que cada vecindario tenga acceso a áreas verdes saludables y seguras. Se busca trabajar junto a grupos comunitarios para identificar las áreas donde se requieren intervenciones prioritarias, especialmente en espacios estrechos donde sólo se pueden plantar árboles pequeños, puntualizó.
Marcos Trinidad, Director Senior de silvicultura en Tree People, explicó que están muy apasionados por abordar los problemas relacionados con el cambio climático y cómo funcionan las ciudades. Han identificado áreas prioritarias que necesitan árboles y han trabajado en colaboración con organizaciones locales sin fines de lucro y con entidades locales, para llevar a cabo proyectos de plantación.
Además, Trinidad dijo que su enfoque es holístico, no sólo se trata de plantar árboles, sino también de brindar oportunidades educativas y laborales a las comunidades. Están explorando modelos híbridos que combinan trabajo voluntario con empleo remunerado para asegurar un desarrollo sostenible. Su objetivo es crear conciencia sobre la importancia de los bosques urbanos tanto a nivel local como global. “Quiero que la gente se despierte y piense qué pájaros van a ver hoy, qué árbol van a experimentar hoy. Si es un árbol a la vez, vamos a seguir adelante y hacerlo”, concluyó.
Para Bz Zhang, Gerente de Proyecto del Fideicomiso de Tierras Vecinales de Los Ángeles, que brinda servicios a más de medio millón de residentes del condado de Los Ángeles, dijo que se han implementado diversas estrategias y tácticas con relación a los espacios verdes públicos. Estos abarcan un total de 21 acres, desde áreas pequeñas de 0,15 acres, hasta un parque más grande que ocupa ocho acres y medio. Además, se espera contar con estacionamientos para árboles dentro de aproximadamente un mes. La organización administra directamente alrededor de 14 parques y jardines durante todo el año, beneficiando a unos 360.000 residentes por año. El resto de los parques son construidos en colaboración con asociaciones locales, recalcó. Así mismo, añadió que “las comunidades no amplias tienen mucho menos acceso a espacios para parques, un 64% menos de parques cercanos, o si desea dividirlo por clase, las comunidades de bajos ingresos tienen aproximadamente un 66% menos de espacio para parques cercanos”.
Finalmente, Jon Christensen, Profesor Asistente del Instituto de Medio Ambiente de UCLA, Luskin del Centro de Innovación y Laboratorio de Estrategias Narrativas Ambientales, aseguró que “somos cada vez más una especie urbana a partir de 2007, más de la mitad de nosotros vivía en ciudades y se espera que esa cifra aumente al 70% en 2050, las ciudades son nuestro hábitat”.
Añadió que los ecosistemas también se han convertido en un área importante de investigación en las ciencias sociales y las humanidades, así como en políticas e inversión pública en todo el mundo. No solo nos permite darnos cuenta de que las ciudades son ecosistemas complejos y es importante entenderlo, sino que también de que necesitamos invertir en ellas para la resiliencia al cambio climático de los seres humanos y otras especies. Es importante que entendamos que las desigualdades han dado forma al entorno urbano.