El calor extremo y su efecto en las poblaciones, particularmente en aquellas que son vulnerables y pobres, pasó a primer plano en las discusiones de diversas ciudades y condados de Estados Unidos. En los últimos años, hemos visto el surgimiento de nuevos roles dentro de los gobiernos locales a cargo de este tema, como por ejemplo, los Chief Heat Officer-CHO o título similar, quienes sensibilizan a los ciudadanos, realizan campañas de información sobre el calor extremo y supervisan que las medidas municipales den respuesta al problema.
El calor mata a más estadounidenses que cualquier otro fenómeno relacionado con el clima. Miami, Phoenix y Los Ángeles, se destacan por su liderazgo a favor de la “lucha contra el calor”. La temperatura en Miami es de las más peligrosas debido su aire tropical; Phoenix, es la ciudad más grande y más calurosa del país; en el caso de Los Ángeles, los expertos predicen que para 2050, la temperatura será cinco veces más cálida.
El pasado viernes 29 de septiembre, Ethnic Media Services convocó a una rueda de prensa a tres Chief Heat Officer de estas ciudades, para que compartieran las estrategias que utilizan en la lucha contra el calor intenso.
La primera ponente fue Marta Segura, Directora de calefacción de la ciudad de Los Ángeles. Al iniciar su intervención dijo que “debemos continuar modificando la infraestructura de nuestras ciudades para adaptarnos al calor extremo, para tener ciudades habitables, en ciudades transitables, por lo que estamos invirtiendo en la descarbonización equitativa de nuestros edificios, de nuestro sistema de transporte y de nuestro Sistema Energético”. Para lograrlo están trabajando con líderes comunitarios, especialmente aquellos de primera línea, a través de Climate Equity LA. Asimismo, están llevando a cabo una campaña que se ha traducido en siete idiomas diferentes, aseguró que están implementando estrategias para que los hogares tengan una refrigeración térmica necesaria y segura durante el verano. Los centros de resiliencia, las bibliotecas públicas, centros de recreación y los espacios para adultos mayores, también están siendo evaluados.
Por su parte, Jane Gilbert, Directora de calefacción de la ciudad de Miami, Florida, señaló que ésta “es conocida internacionalmente por los riesgos de aumento del nivel del mar y huracanes”. Añadió que en el año 2020, la comunidad y las organizaciones basadas en la Coalición, realizaron una serie de encuestas y grupos focales con los grupos más vulnerables del condado para sondear cuáles eran sus preocupaciones en relación al cambio climático. El resultado arrojó que, más que el aumento del nivel del mar o el riesgo de huracanes, las personas estaban preocupadas por el calor extremo ya que lo viven día tras día, en sus trabajos y en sus hogares. Cuando no pueden pagar las facturas de servicios públicos o el aire acondicionado deja de funcionar y no pueden reemplazarlo, los ciudadanos terminan en una sala de emergencias.
Gilbert mencionó algunas medidas que utilizan en Miami para mitigar el calor, como colocar 1.700 unidades de aire acondicionado ahorradores de energía, en las viviendas públicas. Se proyecta que para mediados de siglo, tendrá el aumento más alto de cualquier condado de los Estados Unidos, con días en los que el índice de calor será superior a 100. Comentó que se han dado a la tarea de informar a las personas sobre los efectos del calor en redes sociales, radio y anuncios en las paradas de autobuses. La campaña que ha sido pensada en tres idiomas diferentes: español, inglés y criollo haitiano. Por último, agregó que al ser un problema que afecta a todos, se implementó un programa de capacitación a profesionales de la salud y empleadores para que conozcan los protocolos en caso de riesgo de altas temperaturas.
Finalmente David Hondula, Director de la Oficina de Mitigación y Respuesta al Calor en Phoenix, reveló que en el mes de julio la temperatura de la ciudad alcanzó los 110°F. Los bomberos tuvieron que atender llamadas al 911 relacionadas con este fenómeno. Las autoridades de Phoenix se han enfocado en las personas sin hogar, se reporta que al menos el 40% del total de las muertes asociadas a las oleadas de calor, hacen parte de este sector poblacional. Mencionó que “existen voluntarios individuales dispuestos a sentarse y repartir botellas de agua, sin embargo se necesita hacer una transición de las piezas que funcionan, porque los desafíos que vemos en estos lugares son muy críticos, aunque el esfuerzo voluntario es tremendo, creo que realmente necesitamos capacidad profesional”, concluyó.
En resumen, los expertos compartieron diferentes estrategias que están utilizando en sus respectivas ciudades para mitigar los efectos del calor extremo. Estas incluyen la modificación de la infraestructura urbana, el trabajo con líderes comunitarios, campañas informativas en varios idiomas, la instalación de unidades de aire acondicionado eficientes en viviendas públicas, programas de capacitación y atención especial a las personas sin hogar. Sin embargo, también destacaron la necesidad de contar con más recursos y capacidades profesionales para enfrentar la problemática.