Cada año se celebra en la Organización de las Naciones Unidas, el Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas, este año en su 22ª sesión, el tema fue Pueblos indígenas, salud humana, salud planetaria, territorial y cambio climático: un enfoque basado en derechos, dentro de este foro se congregan líderes indígenas así como representantes de los gobiernos de los países que pertenecen a la ONU.
El pasado 18 de abril, en un evento paralelo, convocado por distintas organizaciones como Kichwa Hatari NYC, Dandelios NYC, la Red de Pueblos Transnacionales, entre otros, se reunieron en La Casa de los Pueblos con la comunidad de pueblos originarios viviendo en Nueva York. Yoloxochitl Marcelino, concejala del Concejo de los Pueblos Originarios fue la encargada de dar la bienvenida en mixteco, una de las lenguas del estado mexicano de Guerrero.
Persecución y hostigamiento
Entre lxs líderes indígenas se contó con la presencia de Gloria Ushigua, coordinadora del movimiento de mujeres sápara, de la provincia de Pastaza, en Ecuador, y quien desde hace varios años ha estado asistencia al Foro desde el año 2015, con el apoyo de distintas organizaciones y comunidades.
Ushigua, desde el 2016, ha sido perseguida y hostigada por defender los derechos ambientales y ancestrales de su pueblo, desde el 2010 se comprometió a defender los derechos de su pueblo Llanchama Cocha contra las compañías petroleras que buscan la extracción del crudo en el territorio sápara, y a pesar de la persecución, y el desprestigio de su activismo en televisión nacional, Gloria se mantiene firme y desde la Amazonía ecuatoriana llegó hasta el Bronx, para compartir su lucha y su palabra.
Los Megaproyectos son la llave para seguir saqueando nuestros pueblos
Así mismo Betina Cruz, del pueblo binnizá de Oaxaca, México, defensora de los derechos humanos, integrante de la Red Nacional de Resistencia Civil contra las Altas Tarifas de Energía Eléctrica, Concejala del Concejo Indígena de Gobierno y de la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en México, quien también compartió su lucha y su palabra con los pueblos originarios viviendo en Nueva York.
En entrevista con el Molino Informativo, nos habló sobre los desafíos que siguen enfrentando contra los megaproyectos impulsados en el sur de México, como lo son las concesiones mineras, hidroeléctricas, parques eólicos. Cruz se enfocó en lo que sucede con el proyecto del Corredor Interoceánico, que cruzara del Puerto de Salina Cruz, Oaxaca al Puerto de Coatzacoalcos, Veracruz, que servirá para la transportación de productos importados principalmente de China. También han tenido la visita del embajador de Estados Unidos, buscando que más recursos puedan extraer de esta región.
Afirmó que este proyecto del Corredor pretende despojar de sus territorios y de igual manera convertir el Istmo de Tehuantepec en la frontera donde se puedan quedar los miles de migrantes de Centro y Sudamérica que cruzan por México, así como la instalación de once parques industriales, en donde “se les dará empleo” a los habitantes de esa zona, es decir serán la mano de obra barata. Ante ello los pueblos se oponen rotundamente, pues no habrá más producción en sus tierras, se perderán sus saberes ancestrales, como la agricultura, por lo que añadió que este corredor “es la llave para que el gobierno siga saqueando los territorios sureste mexicano”.
Dicho Corredor pretende ser conectado con el Tren Maya, en Palenque, Chiapas, con lo que se plantea un nuevo etnocidio. “Los proyectos –Cruz enfatizó– que son para seguir enriqueciendo a los grandes capitales, van dejando a su paso más pobreza, en los pueblos”.
Nunca debemos soltar la lucha
Finalmente tuvimos una conversación con Rossana Huenufil, fundadora de Resistencia de Olla Común, quien viajó desde Valparaíso, Chile, para poder encontrarse con otras luchas. Ella es cocinera tradicional y fue una de las encargadas de cocinar para los asistentes al encuentro, llegó acompañada de su hijo y con lágrimas compartió su lucha y su trabajo.
Huenufil es originaria de las tierras mapuches, quien a través de su cocina y Resistencia Olla Común, vive y muestra su cosmovisión y tradición. Este proyecto nació el 24 de mayo del 2020 con el estallido de la pandemia COVID-19, y del amor de una familia por sus semejantes, conformada por sus hijos, nueras y nietos, como cocineros profesionales decidieron organizarse para ayudar a sus vecinos, con platos de comida, y hasta la fecha lo siguen haciendo, pues aunque la pandemia se ha ido, muchos aún no tiene trabajo. “Valparaíso fue uno de los lugares que quedó completamente destruido”, afirmó.
Rossana dice que la cocina y la alimentación es como acto político, pues una persona nutrida, puede estar más alerta, puede escuchar mejor, lo que a “muchos molesta”, por lo que su cocina social, que no tiene nada que ver con las cúpulas gubernamentales, es totalmente autogestionada, pues ellos salen a trabajar para poder sustentarla, y con el paso del tiempo se ha convertido en una forma de vida.
Resistencia ha estado tratando, en el último año y medio, de convertirse en fundación para obtener fondos del estado, sin embargo, “el gobierno, lo único que hizo fue atrancarnos”, Huenufil, visiblemente triste. Compartió que hace cinco meses, fueron atacados por un grupo de personas, destruyendo todas sus herramientas de trabajo y llevándose algunas otras.”No detendré mi lucha, pues es importante demostrarle a otros que todo es posible”. En el futuro planea tener su propio espacio, por lo que instó a las personas que quieran hacer donaciones para poder continuar con el trabajo, ya que el sueño es poder crear soberanía alimentaria, cultivando sus propios alimentos.
Huenufil cerró diciendo: “Nunca olvidemos que a pesar de todos los dolores que llevamos dentro, el hogar lo llevamos en el corazón, el hogar somos nosotros mismos, pues todos somos migrantes, lo más importante es volver a reinventarnos, pero nunca soltar la lucha, y es seguir enseñando a nuestros hijos nuestra cultura, si las personas no tienen un origen, no tendrán un futuro”.