Crisis de refugiados y migrantes, el principal daño del conflicto Rusia-Ucrania, afirman periodistas y activistas | Molino Informativo

Crisis de refugiados y migrantes, el principal daño del conflicto Rusia-Ucrania, afirman periodistas y activistas

by | Mar 21, 2022 | Comunidades

A finales del mes de febrero de este año estalló un conflicto armado entre Rusia y Ucrania dejando a miles de personas ucranianas desplegadas. Esta guerra ha sido condenada internacionalmente desde el principio, las sanciones económicas por parte de Estados Unidos y la Unión Europea no se hicieron esperar. El Presidente Biden advirtió al mandatario ruso Vladimir Putin,  que cualquier ataque a un país miembro de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) significaría el inicio de una tercera guerra mundial. 

El Servicio de Medios Étnicos, durante su conferencia semanal, invitó especialistas  y periodistas de Ucrania, para que hablaran sobre los impactos de la guerra que estamos viviendo en aquella región. La plática la comenzó Natalia Banulescu-Bogdan directora asociada  del Instituto de Política Migratoria y del Programa Internacional Becario, quien presentó proyecciones sobre las implicaciones a largo plazo para la protección mundial. Natalia mencionó que más de 2.5  millones de ucranianos han huido de la guerra en su país, más de la mitad es decir,  60 por ciento se han refugiado en Polonia. Mientras que otros países de la Unión Europea también cuenta con un número significativo de personas ucranianas. Sin embargo, es importante resaltar que históricamente han sido el pueblo con una alta migración a esta región, previo al conflicto armado. Cifras oficiales refieren que desde el 2020, un 55 por ciento de los permisos de residencia otorgados a trabajadores, por parte de la Unión Europea, era para Ucranianos. Esta misma situación se dio con estudiantes internacionales. 

Natalia mencionó que lo que se está viviendo en este momento son los flujos a través de las fronteras de mujeres, niñas y niños en su mayoría, ya que a los hombres de entre 18 y 64 años no se les permite salir del país. Esto hace que sea posible distinguir a este movimiento migratorio con respecto a otras  crisis de desplazamiento en el pasado, en donde era más común ver a hombres solteros viajando primero. Esta situación hace que la recepción e integración de está población sean diferentes, cambiando las estrategias que se tenían en el pasado. Es importante señalar que también se está presentando un flujo migratorio inverso, es decir que existen personas ucranianas y de otras nacionalidades, que están yendo a Ucrania a combatir. 

La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) estimó que hay más de 470 mil personas extranjeras en Ucrania, alrededor de 66 mil son estudiantes, muchos provenientes de diferentes regiones como África, Asia y Medio Oriente. Se sabe que la evacuación de la zona es mucho más fácil respecto a otros conflictos. Lo que es notorio es que desde 2017, los países vecinos mantienen  sus fronteras abiertas por lo que las y los ucranianos han podido viajar dentro de la Unión Europea sin visas por 90 días,  lo que en estos momentos beneficia en gran medida a la población incluyendo a los más vulnerables. 

Fotos: Manuel Ortiz

Una situación grave es la de la niñez no acompañada que está cruzando fronteras, que son conocidos como “los roma”. Se sabe que actualmente han sido desplazados por lo menos 400 mil menores. En este sentido, otro sector de gran preocupación son los trabajadores y estudiantes que se encuentran en Ucrania, que no califican para protección temporal en la Unión Europea. En contraste, las personas que logran calificar a este tipo de protección, que dentro de sus beneficios se encuentran la regularización migratoria hasta por tres años. Esta decisión fue aprobada el pasado 4 de marzo por el Consejo Europeo, y dentro de los beneficios otorgados son acceso al mercado laboral, a vivienda, a asistencia médica, así como a la educación para las y los niños. Este beneficio en un inicio es para un año, pero se podrá extender para tres. Garantizando una línea base de derechos en toda la Unión Europea para las y los ucranianos, así como para las personas de otras nacionalidades que estaban en Ucrania y que fueron beneficiadas de protección internacional. Esta política se aplica a personas desplazadas bajo estas dos características, a partir del 24 de febrero. Esta resolución beneficia a las personas ucranianas solicitantes de asilo o refugiados para no ser devueltos a su país de origen. Países como Canadá, Estados Unidos y Australia también han hablado de beneficios de personas ucranianas, mencionando que podrán extender sus visados o ser candidatas a reunificación familiar, para lo cual necesitarán acudir a las oficinas adecuadas en el país o ciudad donde se encuentren. Banulesco-Bodgan finalizó diciendo que hay que estar atentos a la rapidez con la que los países puedan aumentar el apoyo.

En esta reunión se encontró Manuel Ortiz quien es cofundador de Península 360 Press, galardonado periodista y docente. Manuel se encuentra en  Lviv, Polonia, muy cerca de la frontera con Ucrania, desde donde nos narró lo que se está viviendo en aquella zona. Reiteró la situación de las personas que huyen de la violencia armada en Ucrania, así como de las personas que buscan regresar a aquel país para tomar las armas, o para llevar ayuda humanitaria. Mencionó que el 11 de marzo por la mañana existieron dos ataques  uno en el norte muy cerca de Lviv y el otro en Líbano, que se encuentra muy cerca a la frontera con Rumania. Habló que aunque Lviv se considera segura, se pueden escuchar las alarmas. Compartió imágenes de personas desplazadas que viajan por lo menos 30 horas en tren, ya que algunas de las carreteras están destruidas. El clima que enfrentan es cruento, pues se enfrentan a un frío intenso, en donde esperan varias horas. Los adultos mayores se van quedando porque no pueden hacer esos viajes tan largos, una vez que cruzan la frontera, existe mucha solidaridad por parte de grupos que se han formado a través de las redes sociales, recibiendolos con comida caliente. Las personas que están ahí afirmaron que no es el gobierno quien está ayudando a las personas refugiadas, sino las mismas comunidades han generado esta ayuda. Ortiz dijo que se  está segregando a la gente con nacionalidad rusa, pues son funcionarios de migración los que deciden quienes pueden pasar, dándoles preferencia a las personas ucranianas, y después de varias horas, los que no son ucranianos.  Algunos de ellos no cuentan con pasaporte lo que hace más difícil su salida. Existe un refugio grande, pero  también los particulares están abriendo sus casas o el servicio de airbnb está donando los espacios para recibir a las personas. Muchos ciudadanos al principio no querían salir pero ahora vemos como el desplazamiento va creciendo. Manuel dijo que se siente la tensión y el hermetismo de las personas en las calles, también dijo que las personas no usan ya las mascarillas por lo del Covid – 19, pues están más preocupados por sus vidas.

La última participación corrió a cargo de Krish O’Mara Vigna Rajah actual presidenta y directora ejecutiva del Servicio Luterano de Migración y Refugiados, una organización nacional sin fines de lucro, que basa sus esfuerzos en servicios de migración y refugiados. Krish particularmente se refirió a Moldavia, que colinda al sur y este con Ucrania, que está empezando a recibir el número más alto de refugiados. Habló sobre la visita de la vicepresidenta de Estados Unidos Kamala Harris a la zona de conflicto, quien durante una conferencia de prensa en la que dijo que Polonia está luchando bajo presión, con más de un millón de refugiados en el país. Estados Unidos se encuentra apoyando a este país con casi 53 millones  de dólares,  para responder a las necesidades humanitarias en Ucrania, a través de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID). Esto solo es una  primera parte aprobada, representando menos de la mitad un paquete de 13 mil 600 millones de dólares que serán destinados principalmente para alimentos, refugios y agua potable. O’mara dijo que no se debe asumir que todas los ucranianos que se han ido de su país  quieran venir a Estados Unidos,  pues existen muchos lazos comunitarios y culturales en otros países como Polonia y Alemania. Estos países tienen políticas migratorias más flexibles para esta población, pues son elegibles para los servicios sociales. En Estados Unidos es más complejo, pues la protección temporal es que una sola persona ingrese al país, y tenga un documento de permiso de trabajo, es decir no es un permiso sólido o permanente.

Se espera un mayor éxodo de personas que estén más allá de la proyección de la Organización de las Naciones Unidas de 24 millones de refugiados, el comisionado de este organismo calculó que pueden ser hasta de  7 millones más, por lo que la capacidad y disposición de Europa de ayudarlos se pondrá a prueba. Es justamente en ese momento de inflexión  donde sería importante para que Estados Unidos intervenga de manera indirecta y más sólida. De ser así, deberá de estar preparado con un programa de refugiados. Es relevante señalar que tenemos el programa de emisiones que comenzó en 1980, el cual existe un límite anual de personas refugiadas, para ello el presidente tiene que consultar con el congreso y así establecer el número que crean apropiado. La administración de Biden estableció 12 mil por año, sin embargo, este número aumentó a 25 mil, por lo que se sigue reconstruyendo el programa. Por ahora, el programa tiene  5 meses que comenzó en este año fiscal presentándose hasta el momento 6 mil 500 aplicaciones de personas, lo que significa que aún tiene capacidad para aceptar personas refugiadas.

En Europa existen ahora una asignación de 10 mil personas refugiadas, por lo que será importante saber qué pasará cuando se rebase esa cifra. Krish dijo que se ha reconstruido la infraestructura en parte para reubicar a 76 mil aliados afganos, sin embargo, la capacidad internacional no se ha reconstruido como debe ser y, es en este punto, donde Estados Unidos debe volver a contratar oficiales refugiados que sean los llamados circuito de conducción. Como comentario final hizo referencia a números pequeños de refugiados ucranianos que viajan a México, y tratan de cruzar la frontera. Un ejemplo, fue el de una madre  con sus tres hijos, que fue rechazada varias veces hasta que al final la dejaron ingresar. La complicación para el gobierno es que aun sigue aplicando el Título 42, que es la expulsión de los migrantes en la frontera sin derecho a solicitar asilo u otras protecciones humanitarias, una política de la era Trump y que esta administración aún tiene vigente, aunque muchas organizaciones de inmigración han pedido el fin de esta política.